miércoles, 8 de septiembre de 2010

La automotivación como motor del cambio

Varias formas de desarrollar y mantener la AUTOMOTIVACIÓN:

1 - La actitud lo es todo. La actitud no es más que las “gafas” con las que miras el mundo que te rodea y todo lo que te ocurre. Condiciónate diariamente para estar motivado.

2 - Evita comparaciones. Estar comparándote constantemente con los demás te quitará una enorme cantidad de energía, pues estarás centrado en el exterior en vez de en tu interior, que es donde debes poner el foco para introducir mejoras y alcanzar objetivos. Recuerda que eres único y especial

3- Acepta la responsabilidad de tus acciones, resultados y de tu propia vida. No eches balones fuera ni busques culpables a tu alrededor cuando las cosas no van como quieres. La mayor enfermedad de la enfermedad es la “excusitis crónica”.

4 – Haz un listado de tus propios logros. Para y reflexiona. Toma conciencia de los pasos que vas dando y de lo que vas consiguiendo, te situará en un nivel de pensamiento de “Yo puedo conseguirlo, sé que puedo”.

5 – Valora y muestra gratitud por todo lo que te rodea. Es una forma muy poderosa de estar motivado ante la propia vida y preparado para la acción. Es como tener el motor del coche en marcha, preparado para iniciar la marcha en cualquier momento.

6 – Vive apasionadamente. Añade un elemento extra a todo lo que haces ordinariamente. Ten una visión estimulante de la vida y ten un motivo real para vivir. Ten una visión de soñador y crea imágenes que difuminen y anulen los pensamientos negativos.

7 - Activa la rueda del éxito. Un resultado lleva a otro a resultado. Conseguir un objetivo te lleva a desear conseguir el siguiente. Rétate a conseguir resultados, esto multiplicará tu motivación y pondrá en marcha la rueda del éxito... más motivación, más resultados, más resultados.... es un bucle infinito.


8 – Alimenta tu mente con mensajes positivos. Dedica un tiempo cada día a generar en tu mente la motivación que la rutina diaria hace perder. Alimenta tu estómago, pero también tu mente.

9 – Picos y Valles. Aprovecha tus momentos de alta motivación para avanzar en aquellos objetivos que te has propuesto, no dejes escapar esos picos en los que tu motivación se ha disparado y consigue avances espectaculares. Pregúntate: ¿Que ha hecho que me sienta tan motivado y predispuesto para la acción? Anota la respuesta y tendrás una información muy importante para volver a motivarte recreando situaciones similares.